Existen aplicaciones con candados para restringir el acceso a los menores a algunas páginas o temas. Sin embargo es indispensable educar a los niños desde pequeños en el uso moderado de los aparatos y la elección de la programación explicando qué es adecuado y qué no lo es. Para esto resulta muy necesario establecer claramente en las familias los valores universales y no sólo los expliquen sino se ejerzan dentro del ámbito familiar.
Además es de suma importancia acompañar al menor en su navegación y explicar cómo deben cuidar sus datos personales, explicar que hay personas mal intencionadas que se aprovechan de la inocencia e ignorancia para cometer delitos.
Por otro lado, es importante limitar el tiempo de uso de los aparatos electrónicos no sólo en los menores sino en todos los miembros de la familia.
Creando acuerdos y haciéndolos respetar.
Si a un niño muy pequeño se le distrae o entretiene con estos aparatos tecnológicos, los adultos están contribuyendo a crear dependencia, disminuye el interés por otras actividades, necesitan respuestas inmediatas, no se les enseña a tolerar la frustración, y se vuelve cada vez más una sociedad deshumanizada, conectada a la tecnología pero desconectada de las relaciones personales.